La primavera llega a un fin, las estaciones parecen obras de teatro que se repiten una y otra vez, ¿es un ciclo el fin que ansío o es el final de las estaciones mi mayor deseo? Que se extiendan por el suelo todos los nombres y se despeguen de mi cuerpo todas las cicatrices, poder dormir tranquilo y quizás despertar sin ningún golpe en el corazón. Empezar a creer, no en ningún dios, no en ti, solo creer en algo más que yo mismo. Quizás ni recordar que un día necesité buscar en sueños lo que había perdido, volver al lugar donde nunca debí dejarte solo tanto tiempo y que estuvieras ahí, esperándome con esa sonrisa de la que me enamoré y que tanto me cuesta borrar cuando miro atrás.
Ahógate conmigo hasta mañana, solo una vez más, donde siempre.
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